Andrew Cuomo declaró la violencia armada como una emergencia sanitaria pública. (Foto: @NYGovCuomo)

Emergencia sanitaria pública, la otra alerta de Estados Unidos

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El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, declaró la violencia armada como una “emergencia sanitaria pública” con el objetivo de tomar medidas contra las armas ilegales y grupos armados en medio de un repunte de las tasas de este tipo de violencia en Estados Unidos.

Es el primer paso que da el país y que permite a Nueva York asignar dinero rápidamente así como otros recursos a las zonas especialmente afectadas por este problema. Así al menos lo indicó Cuomo

“Si se puede vencer el coronavirus, se puede vencer la violencia con armas”, declaró y remarcó que "estamos en una nueva epidemia, y es la violencia de las armas, y también es una cuestión de vida o muerte”. 

El anuncio se realizó justo después de conocerse que al menos 150 personas habían perdido la vida como resultado de la violencia armada en más de 400 tiroteos registrados en todo Estados Unidos durante el fin de semana del 4 de julio, según los datos recogidos por el Gun Violence Archive.

En el caso de Nueva York, donde las tasas de violencia armada se elevaron hasta niveles muy altos, nunca vistos en años. Entre el viernes y el domingo pasado fallecieron 26 personas en un total de 21 tiroteos. La cifra, no obstante, es menor que la constatada en el mismo período de 2020, cuando fallecieron 30 personas en 25 tiroteos, según los datos del Departamento de Policía.

Tras un aumento de los incidentes de este tipo durante los últimos meses, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció una batería de medidas enfocadas a reducir la violencia con armas de fuego, particularmente centradas en “armas fantasma”, aquellas vendidas sin número de serie ni información de identificación. Biden ya había prometido una serie de medidas en este sentido en campaña electoral.

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