La Guardia Revolucionaria de Irán derribó un dron de vigilancia MQ-4C Triton

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La Guardia Revolucionaria de Irán confirmó y reivindicó el derribo un "dron espía estadounidense". Afirmó que había violado el espacio aéreo de la República Islámica de Irán. El Pentágono reconoció la pérdida de un dron de vigilancia en el momento en que se encontraba en el espacio aéreo internacional sobre el estrecho de Ormuz.

Se trata de un MQ-4C Triton de la Marina. Fue alcanzado, en el área del estrecho de Ormuz, por un misil tierra-aire. El Northrop Grumman MQ-4C Triton -vehículo aéreo no tripulado (UAV)- ha sido desarrollado para la Marina de los Estados Unidos como avión de reconocimiento. Realiza sus funciones en el marco del programa de zona de vigilancia marítima amplia (BAMS). Apoya al avión de patrulla marítima Boeing P-8 Poseidon.



“El derribo del dron americano es un claro mensaje a América. Nuestras fronteras son la línea roja de Irán. Reaccionaremos enérgicamente contra cualquier agresión”, declaró y amenazó el jefe de la Guardia Revolucionaria, el general Hosein Salami.

Irrumpen así, con todo su poder, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, la Guardia Revolucionaria o Pasdarán creada tras la revolución de 1979. En su día el ayatolá Jomeini tuvo receló hacia las Fuerzas Armadas de Irán. Decidió armar a unas fuerzas fanáticas que en el érea del estrecho de Ormuz y golfo de Omán tienen hoy capacidad con sus lanchas torpederas, su capacidad área y sus baterías de misiles en la costa. Atención a que en este clima de tensión, los rebeldes Huthi de Yemen han aumentado sus ataques a Arabia Saudí.

Donald Trump ha advertido que "¡Irán cometió un error muy grande!". "Se trata de un ataque injustificado a un aparato de vigilancia estadounidense en el espacio aéreo internacional", denunció por su parte Bill Urbanportavoz de la Marina en el Pentágono.

En las últimas semanas, Estados Unidos envió un portaaviones a Oriente Medio y desplegó tropas adicionales a las decenas de miles de soldados que ya tiene en la región. Los analistas advierten seriamente del peligro de un error de cálculo que  termine por empujar a Washington y Teherán a un conflicto abierto casi 40 años después de la Revolución Islámica en Irán.
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