La peor plaga de chinches desde la Segunda Guerra Mundial. (Foto: Envato)

Europa devastada ante la peor plaga de chinches en mucho tiempo

Compartir en:
En Francia, y especialmente en París, se está enfrentando a una invasión de chinches de cama en lugares como hospitales, transporte público, cines, y habitaciones de hoteles.

Estos insectos de color marrón rojizo buscan el contacto con los seres humanos para alimentarse de su sangre, y la situación en el país galo es alarmante. Un 10% de los hogares franceses han experimentado problemas con estas chinches en los últimos años, y su presencia sigue aumentando, extendiéndose cada vez a más espacios, especialmente en Europa.

La crisis de las chinches de cama está mostrando un "aumento significativo desde el final de la Segunda Guerra Mundial", según explica Rubén Bueno, entomólogo y director técnico de Rentokil Initial, una empresa líder mundial en control de plagas. Estas chinches se consideran ahora "especies emergentes", lo que significa que su población está en constante crecimiento.

Este problema no se limita a Francia, ya que, según el experto, la situación es similar en otros lugares de Europa y específicamente en España, donde las infestaciones de chinches de cama aumentaron un 71% entre enero y septiembre de 2023 en comparación con el mismo período del año anterior.

Bueno destaca que la proliferación de estos insectos está estrechamente relacionada con la actividad humana. Dado que se alimentan de sangre humana y residen en colchones, sábanas, somieres, muebles, maletas y ropa, es natural que se propaguen a medida que las personas se desplazan.

La globalización y los movimientos de las personas desempeñan un papel fundamental en la expansión de estas plagas.

Además, las chinches son capaces de permanecer en entornos adaptados para los humanos, como camas de hoteles o hospitales, ya que el entorno térmico que es cómodo para las personas también lo es para ellas.

Pueden sobrevivir durante largos períodos sin alimentarse, incluso más de un año, lo que facilita su persistencia en lugares como el transporte público, hospitales, cines y hostales.

Otro factor que ha contribuido al aumento de las chinches es su desarrollo de resistencia a los insecticidas utilizados para controlarlas. La falta de rotación en el uso de productos químicos ha llevado a que estas plagas desarrollen resistencia, y su empleo excesivo ha contribuido a este problema.

Rubén Bueno enfatiza que la solución química debería ser considerada como último recurso para la erradicación de las chinches, y sugiere la necesidad de diversificar los métodos de control para abordar eficazmente esta creciente amenaza.
Compartir en: