Los militares españoles no se han visto afectados por la masacre en Kabul

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El Estado Mayor de la Defensa comunicó que ninguno de los efectivos del Ejército de España destacados en la capital de Afganistán, Kabul, ha sufrido ningún daño. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, han seguido al minuto las circunstancias del dramático atentado.

"España se solidariza con el pueblo afgano ante la continua amenaza terrorista. Mis condolencias por las numerosas víctimas y deseos de pronta recuperación a los heridos. La unidad de los demócratas vencerá a la barbarie", el mensaje de Mariano Rajoy en las redes sociales.

El atentado se produjo en medio de una escalada de ataques terroristas contra objetivos civiles por parte de talibanes y del Estado Islámico (ISIS). El pasado fin de semana 40 personas murieron en el Hotel Intercontinental de Kabul durante un asalto perpetrado por seis atacantes que mantuvieron un enfrentamiento con las tropas de seguridad durante 12 horas.



El miércoles 24 un ataque del ISIS contra la sede de Save the Children en Jalalabad, acabó con la muerte de cuatro empleados de la organización no gubernamental, un transeúnte y un miembro de las fuerzas de seguridad, así como de los cinco terroristas.

Aunque en los primeros nueve meses del año pasado el cómputo de víctimas civiles por el conflicto descendió en un 6%, la primera vez que se producía un retroceso desde 2012, las cifras fueron de 2.640 muertos y 5.379 heridos, todavía "niveles altos", según la ONU. El escenario que se está abriendo en 2018 es de fuerte incertidumbre.

En el primer balance de la matanza terrorista en este sábado 27, al menos 63 muertos y 151 heridos al estallar una ambulancia bomba en Kabul. El coordinador de la ONG italiana Emergency, que atienden en su hospital a 50 heridos, calificó el atentado de "masacre".
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