Nicolás Maduro contra Mauricio Macri y Juan Manuel Santos, y llamada al Papa
La nueva vida de Luisa Ortega Díaz, asentada en Colombia, y viajando por América Latina, para denunciar con rigor la corrupción que envuelve a Nicolás Maduro y su familia, y las lacras que rodean a la cúpula del chavismo radical, han creado conmoción en Caracas.
Los ataque de Nicolás Maduro son ahora en tromba contra Juan Manuel Santos. Y también contra Mauricio Macri por coordinar e impulsar el rechazo de América Latina a la Constituyente.
Nicolás Maduro aseguró ser "víctima" de Mauricio Macri a quien calificó de "cobarde". "Yo soy víctima de Macri y de su obsesión y de su prepotencia y de su intervencionismo", dijo en una conferencia de prensa en Venezuela. Aseguró que "no tiene potestad para quitarle al pueblo venezolano lo que le pertenece", en alusión a la Orden del Libertador General San Martín que Mauricio Macri prometió retirarle a Nicolás Maduro.
"Si Mauricio Macri quiere que le regresemos" la condecoración, "que la venga a buscar y se la quite al pueblo venezolano a ver si puede, cobarde", sentenció.
A la vez el Palacio de Miraflores trata de restablecer los canales de comunicación con el Papa. Le pidió ayuda para un diálogo con la oposición e impedir que se concrete la advertencia de Donald Trump de intervenir militarmente en Venezuela.
"Que el Papa nos ayude al diálogo respetuoso, a la verdad, que el Papa nos ayude a impedir que Trump lance sus tropas e invada Venezuela. Le pido al Papa ayuda contra la amenaza militar de Estados Unidos", dijo Nicolás Maduro.
En Caracas, en un ambiente muy complejo, empieza a existir preocupación entre asesores y analistas por los errores de Nicolás Maduro y el rol de los cubanos creando un clima de ruptura a la vez con el Papa, Estados Unidos, América Latina, y Unión Europea.
Los ataque de Nicolás Maduro son ahora en tromba contra Juan Manuel Santos. Y también contra Mauricio Macri por coordinar e impulsar el rechazo de América Latina a la Constituyente.
Nicolás Maduro aseguró ser "víctima" de Mauricio Macri a quien calificó de "cobarde". "Yo soy víctima de Macri y de su obsesión y de su prepotencia y de su intervencionismo", dijo en una conferencia de prensa en Venezuela. Aseguró que "no tiene potestad para quitarle al pueblo venezolano lo que le pertenece", en alusión a la Orden del Libertador General San Martín que Mauricio Macri prometió retirarle a Nicolás Maduro.
"Si Mauricio Macri quiere que le regresemos" la condecoración, "que la venga a buscar y se la quite al pueblo venezolano a ver si puede, cobarde", sentenció.
A la vez el Palacio de Miraflores trata de restablecer los canales de comunicación con el Papa. Le pidió ayuda para un diálogo con la oposición e impedir que se concrete la advertencia de Donald Trump de intervenir militarmente en Venezuela.
"Que el Papa nos ayude al diálogo respetuoso, a la verdad, que el Papa nos ayude a impedir que Trump lance sus tropas e invada Venezuela. Le pido al Papa ayuda contra la amenaza militar de Estados Unidos", dijo Nicolás Maduro.
En Caracas, en un ambiente muy complejo, empieza a existir preocupación entre asesores y analistas por los errores de Nicolás Maduro y el rol de los cubanos creando un clima de ruptura a la vez con el Papa, Estados Unidos, América Latina, y Unión Europea.
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