El presidente filipino Rodrigo Duterte anuncia su retirada
En las últimas declaraciones de Rodrigo Duterte manifiesta que no tiene intención de volver a presentarse como candidato en las elecciones de 2022.
El presidente filipino Rodrigo Duterte anuncia su retirada antes de lo previsto y en contra de unas declaraciones previas que habría hecho meses antes.
Una vez finalice su mandato este presidente no volvería a presentarse y abandonaría el terreno político. Esta decisión sería comunicada en la comisión electoral durante su visita acompañado del senador Bong Go.
A sus 76 años Duterte tiene claro que no va a perpetuar su posición en la política cuando ha percibido que los filipinos no lo consideran cualificado y, además, la constitución no permite la renovación de su mandato. Esta retirada no es solo una retirada de las próximas elecciones sino un abandono de la vida política.
El propio Duterte ha puesto de manifiesto que el cambio de opinión sobre su continuidad en la vida política ha venido también influido por el hecho de que los resultados de las encuestas no le daban muchas oportunidades de revalidar el cargo.
Por tanto, siendo consecuente con lo que ha percibido de los votantes y con lo que establecen las leyes, dejaría de presentarse para ser candidato dando así paso a otros candidatos.
Su política contra las drogas en entredicho
Uno de los baluartes de Duterte cuando llegó al poder fue la promesa de que iba a luchar con todas sus posibilidades para acabar con las drogas en el país. Algunos interpretan este abandono de la carrera política como una estrategia para evitar la justicia.
El 15 de septiembre la Corte Penal Internacional dio autorización a la investigación de la guerra contra las drogas que este presidente inicio cuando llegó al poder. Una guerra que ha provocado miles de muertos en todas las redadas de policías contra traficantes y drogadictos.
Todo parece indicar que este presidente aplicó unas políticas bastante severas en la lucha contra las drogas que podrían haber incurrido en alguna ilegalidad que ahora se investigaría con las consecuencias que pueden derivarse de ello.
Todo apunta a que su hija podría ser la sucesora
Muchos apuntan a que su hija Sara Duterte-Carpio podría ser la próxima candidata a las elecciones de 2022. Aunque originariamente esta posibilidad habría sido desmentida por el propio Duterte, parece que todo indica a que su hija sería la candidata idónea.
Podría ser posible que su propia hija lo proteja de los cargos criminales que puedan asignarle frente a la Corte Penal Internacional.
La continuidad de su hija se configura cada vez más como una opción real y clara ante las últimas declaraciones realizadas por el propio Duterte. Se trataría de una forma de darle continuidad a su gobierno, aunque su hija tendrá su propia forma de afrontar los problemas y necesidades del país.
Sin duda, se trata de acontecimientos que mantienen al país en incertidumbre hasta que se resuelva toda la situación y se decida quién será el próximo candidato o candidata al presidente.
El presidente filipino Rodrigo Duterte anuncia su retirada antes de lo previsto y en contra de unas declaraciones previas que habría hecho meses antes.
Una vez finalice su mandato este presidente no volvería a presentarse y abandonaría el terreno político. Esta decisión sería comunicada en la comisión electoral durante su visita acompañado del senador Bong Go.
A sus 76 años Duterte tiene claro que no va a perpetuar su posición en la política cuando ha percibido que los filipinos no lo consideran cualificado y, además, la constitución no permite la renovación de su mandato. Esta retirada no es solo una retirada de las próximas elecciones sino un abandono de la vida política.
El propio Duterte ha puesto de manifiesto que el cambio de opinión sobre su continuidad en la vida política ha venido también influido por el hecho de que los resultados de las encuestas no le daban muchas oportunidades de revalidar el cargo.
Por tanto, siendo consecuente con lo que ha percibido de los votantes y con lo que establecen las leyes, dejaría de presentarse para ser candidato dando así paso a otros candidatos.
Su política contra las drogas en entredicho
Uno de los baluartes de Duterte cuando llegó al poder fue la promesa de que iba a luchar con todas sus posibilidades para acabar con las drogas en el país. Algunos interpretan este abandono de la carrera política como una estrategia para evitar la justicia.
El 15 de septiembre la Corte Penal Internacional dio autorización a la investigación de la guerra contra las drogas que este presidente inicio cuando llegó al poder. Una guerra que ha provocado miles de muertos en todas las redadas de policías contra traficantes y drogadictos.
Todo parece indicar que este presidente aplicó unas políticas bastante severas en la lucha contra las drogas que podrían haber incurrido en alguna ilegalidad que ahora se investigaría con las consecuencias que pueden derivarse de ello.
Todo apunta a que su hija podría ser la sucesora
Muchos apuntan a que su hija Sara Duterte-Carpio podría ser la próxima candidata a las elecciones de 2022. Aunque originariamente esta posibilidad habría sido desmentida por el propio Duterte, parece que todo indica a que su hija sería la candidata idónea.
Podría ser posible que su propia hija lo proteja de los cargos criminales que puedan asignarle frente a la Corte Penal Internacional.
La continuidad de su hija se configura cada vez más como una opción real y clara ante las últimas declaraciones realizadas por el propio Duterte. Se trataría de una forma de darle continuidad a su gobierno, aunque su hija tendrá su propia forma de afrontar los problemas y necesidades del país.
Sin duda, se trata de acontecimientos que mantienen al país en incertidumbre hasta que se resuelva toda la situación y se decida quién será el próximo candidato o candidata al presidente.
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