Shinzo Abe, una sólida victoria para la reforma de la Constitución

Compartir en:
fjrigjwwe9r1_articulos:cuerpo
El Partido Liberal Demócrata (PLD) y su socio, el Komeito, los grandes vencedores en una elección bajo la amenaza del tifón Lan, de categoría 4. Según las proyecciones de la NHK, la cadena estatal, lograron la mayoría absoluta.

Shinzo Abe no dudó en afrontar el reto de adelantar las elecciones ante los grandes retos para Japón en la región de Asia Pacífico y la loca carrera nuclear de Corea del Norte. Ganó con creces su apuesta.



Shinzo Abe pulverizó todas las marcas de la política en Japón al convertirse en el primer ministro más longevo en la historia japonesa de la posguerra. Tendrá una mayoría absoluta de dos tercios en la Cámara Baja. Logrará así abrir la cuestión delicada, compleja -y a la vez necesaria- de la reforma de la Constitución.

Según proyecciones -la encuesta a pie de urna de la televisión TBS-, el Partido Liberal Demócrata (PLD) del primer ministro y su aliado Nuevo Komeito logran 311 escaños, del total de 465 de la Cámara Baja.

El Partido Constitucional Demócrata de Yukio Edano obtuvo entre 44 y 67 escaños. La que es una escisión del desaparecido Partido Demócrata se convierte en el principal partido de la oposición. El Partido de la Esperanza (Kibo no To) de la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, la tercera fuerza.

Shinzo Abe logró un mandato sólido en los mentos inciertos de los desafios de Corea del Norte con el programa nuclear de Kim Jong-un. Es un respaldo también a las Abenomics, la política monetarioa de apoyo a las exportaciones; y las necesarias medidas ante el envejecimiento de la población.

Se abre también el debate de la gran reforma. Shinzo Abe planea convocar un referéndum para la reforma de la Constitución redactada por Estados Unidos tras la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial. Será la gran cuestión de su tercer mandato.
Compartir en: